FRANCISCO RAÚL VEGA VILLEGAS

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           CHEYENES DEL INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL.

FRANCISCO RAÚL VEGA VILLEGAS

Entrevista hecha por: Juan Cervera Sanchís.

Del libro Ajedrez: Pasión y Misterio.

Francisco Raúl Vega Villegas nació en la ciudad de México el 17 de marzo de 1962. Licenciado en Educación Física por la Escuela Superior de Educación Física (ESEF) perteneció al equipo de futbol americano los Cheyenes del Instituto Politécnico Nacional. Hijo del capitán de infantería, e ingeniero en electrónica, don Francisco Vega. Francisco Raúl, desde muy pequeño, vio jugar ajedrez a su padre con sus amigos militares. Le llamaba mucho la atención verlos jugar sumidos en profundo silencio.

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ESCUELA SUPERIOR DE EDUCACIÓN FÍSICA (ESEF)

-Me llamaba la atención el silencio que sólo se rompía al final de cada partida. Fue mi padre quien me regaló mi primer libro de ajedrez. No me acuerdo del nombre del autor, sí del título: Trampas y celadas del ajedrez. Con la lectura de ese libro supe cómo se movían las piezas. Sentí desde entonces que el ajedrez era algo sagrado. Empecé a jugar en un círculo de amigos, yo tenía 9 años, ellos eran un poco mayores de edad. Me dieron mi primer mate al pastor, pero pronto aprendí y un día sorprendí a uno de ellos dándole ese mate, lo que no le hizo mucha gracia. Poco después gané el torneo de la Secundaria Técnica.

-¿Te enfrentaste a tu papá?

-Sí, hombre, cometí la imprudencia de jugar con él y ganarle. La verdad es que no me sentí nada bien ganándole. Es por eso por lo que desde entonces ya no nos hemos dado tiempo para volver a juagar. Una partida fue suficiente.

-¿Cómo es la gente del ajedrez en México?

Imagino que como en todas partes, aunque sólo conozco  a nuestra gente.

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CENTRO CULTLURAL JOSÉ MARTÍ. Club de Ajedrez, que coordina el señor don Julio Soler Mendoza.

    Yo empecé a conocer a la gente del ajedrez en el Centro Cultural José Martí, con el señor Julio. Después fui conociendo a más ajedrecistas en el Club de periodistas y en el Chapultepec. La gente piensa que somos extraterrestres. Ahí conocí a los hermanos Garméndez, hoy maestros nacionales.

-¿Forman una especie de secta los ajedrecistas?

-Habría que hablar de niveles, los que están allá arriba, en primer nivel, forman una secta cerrada. Ya en los niveles medios se ve el ajedrez desde otra perspectiva, en la que yo siento más hermandad, pues así como compartimos partidas la vida en todas sus facetas.

-¿Es el ajedrez en México un juego de machos?

-No tenemos noticias, por lo menos dentro de la historia conocida, de mujeres que hayan destacado en el ajedrez entre nosotros. Debo decir que el presidente Carlos Salinas de Gortari ha sido ahora el presidente que más ha impulsado, la verdad por delante, el ajedrez en México, pues en su sexenio en el que el ajedrez recibió su más fuerte apoyo. Todo cambió y empezaron a surgir mujeres ajedrecistas como consecuencia de dicho apoyo. En estos momentos siento venir una camada de mujeres que juegan a un buen nivel, desde niñas, adolescentes y adultas.

-¿Nombres?

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       M.I. YADIRA HERNÁNDEZ GUERRERO

    M.I. ALEJANDRA GUERRERO RODRÍGUEZ.

 

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M.I. ASTRID MARIN DEL CAMPO C.

Excelente maestra, coordinadora, y difusora del ajedrez en México.

-Yadira Hernández, Alejandra Guerrero y Astrid Martin del Campo Cárdenas. Ellas ya juegan en el nivel superior. El ajedrez en México era elitista, por no llamarlo machista. Yo recuerdo que en el Torneo del Palacio de Minería, un amigo ajedrecista de alto nivel que fue vencido por una joven mujer, se sintió tan herido en su hombría que a la fecha no ha recobrado su nivel. Sin duda, en México, todavía hay quienes confunden la inteligencia y las capacidades intelectuales con la virilidad.

Por fortuna se están dando cambios y muchos ya ven la participación del la mujer en el ajedrez, y las demás actividades de la vida, como algo normal.

-Alabada sea la razón, Francisco Raúl ¿Qué otras jóvenes mujeres empiezan a brillar con la luz propia en el ajedrez mexicano?

-En estos momentos destacan con imperiosa lucidez Tania Santos Hernández y Lidia Llerena Ortiz, de 15 y 14 años de edad, respectivamente, quienes han ganado campeonatos de inter-secundarias y el campeonato del Distrito Federal, 2000 y 2001. Hay, además, una niña de 11 años de edad, que sorprende a todos, y que dentro de su nivel, Infantil, es la gran campeona del D.F. Me refiero a Diana Quiroz Navarro. Atención a su desarrollo.

-¿La educación física en México?

-Empieza a tener forma y fondo. Se está logrando que la gente se desarrolle cada vez mejor en esta nueva etapa del país. Nosotros esperamos, volviendo al ajedrez, que las autoridades, al igual que creen en la educación física crean también en el ajedrez y le den la real importancia que tiene en el desarrollo y la educación de la mente. Impulsar el ajedrez, recreativo escolar es de hecho muy positivo para las nuevas generaciones y, por ende, para el país. En este punto de impulsar el ajedrez hay que agradecer lo que han hecho entre nosotros, hombres como el profesor Mario Antonio Barajas y don Benjamín González Roaro y lo que se está haciendo en la Delegación Gustavo A. Madero. Despertar en nuestras niñas y niños el interés por el ajedrez, en mi opinión, es importantísimo, además de muy divertido e interesante.

-Ojalá en México, en unos pocos años, tengamos nuestro campeón mundial de ajedrez, sería maravilloso que fuera, por primera vez en la historia, una mujer. Hay que despertar los talentos de la raza cósmica, de que no hablara José Vasconcelos, que alientan y laten en cada niña y niño mexicanos, anunciando el más promisorio de los futuros para el país.